La piel es el mayor órgano de nuestro cuerpo y cumple funciones muy importantes: protección, termorregulación, sintetización de vitamina D, percepción sensorial y defensa inmunológica.
Si cuidamos de ella, la piel podrá desarrollar esas funciones y protegerse de agentes que pueden dañarla; como la contaminación, el frío, la exposición prolongada al sol, etc..
Los cosméticos naturales, desempeñan un gran papel en este sentido; cuidan nuestra piel y también la del planeta gracias al uso de ingredientes respetuosos con el mismo.
Nuestros exfoliantes están formulados siguiendo esos principios; ingredientes de origen local como lo es la sal (Salinas de Añana, Álava) de la Línea Spa&Wellness, aceites esenciales, aceites vegetales de 1ª presión en frío y ningún tipo de microplástico, tan usados en muchos exfoliantes corporales, dañando así gravemente el medioambiente.
La sal elimina las células muertas o impurezas de la piel, el aceite de almendras suaviza la piel dejándola sin necesidad de cremas adicionales y el aceite esencial de lavanda relaja y calma los sentidos.
La fórmula está pensada para la ducha; moja tu piel, echa un puñado de exfoliante corporal de lavanda en la mano y frota suavemente el resto del cuerpo.
Retira los restos de sal con un poco de agua y jabón y ya estarás lista/o para beneficiarte de una piel limpia, hidratada y con un aroma suave de lavanda.
INCI:
Mineral Salts, Prunus Amygdalus Dulcis Oil, Lavandula Angustifolia oil